1- El humo de la marihuana es menos perjudicial que el del cigarrillo: Muchos no están de acuerdo e incluso dicen que el humo de un porro es más tóxico que el del tabaco, pero lo cierto es que un fumador de marihuana, difícilmente podría fumar a la par con una persona que consume dos cajetillas diarias. Cuarenta porros diarios no es una hazaña que hagan muchos. Pero si hay que decir que los consumidores de cannabis suelen mantener el humo por más tiempo en los pulmones.
2- Fumar cannabis no exacerba los problemas mentales, al contrario: Los episodios violentos de las personas, o conductas criminales suelen asociarse al consumo de alcohol o drogas. Pero la marihuana no suele ser un detonante de estas conductas. Es muy poco probable que un asesino o violador, gatille estos bajos instintos por fumarse un porro. Sin embargo, la cocaína o una botella de whisky pueden estimular con mayor fuerza los problemas mentales o esquizofrenia de un sujeto. Esto no quiere decir que una persona normal pierda la cabeza solo por consumir estas sustancias.
3- Legalizar la marihuana podría bajar la tasa de suicidios: Un estudio de la Universidad de San Diego y la Universidad Estatal de Montana, en EE.UU., comprobó que en el proceso de legalización de marihuana los índices de suicidios entre los estadounidenses de entre 20 y 39 años de edad bajaron considerablemente.
4- Los accidentes automovilísticos los protagonizan en su mayoría personas que consumieron alcohol u otras drogas, y en un ínfimo porcentaje quienes fumaron marihuana: Según una investigación, el vínculo de marihuana y accidentes de tránsito casi no existe.
5- El cannabis tiene propiedades medicinales: No es un secreto que miles de personas consumen marihuana para reducir sus dolencias físicas. Este analgésico natural es mucho más antiguo que los que venden las farmacias tradicionales. Aliviar la esclerosis, artritis y contracciones musculares son las muchas especialidades de la marihuana.
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